martes, 16 de abril de 2019

¿Y cuando todo va bien?

Sí. Siempre estamos acostumbrados a quejarnos por todo. Que si tengo que levantarme pronto para trabajar, que si mi pareja esto o lo otro, que si mi compañera de trabajo hace cosas que me incomodan, que si mi madre me controla, que si mi padre está pesado pero... ¿y, si por un momento o, durante unos días, nos sentimos rebosantes de felicidad? ¿Sintiendo que ésta es la vida que queremos vivir?

De repente no encuentras motivos para quejarte y tan sólo puedes dar las gracias por todo lo que te pasa. Dar las gracias al Universo por cada pequeña cosa, por cada pequeño gesto de amor que percibes a tu alrededor. GRACIAS GRACIAS GRACIAS.

Gracias por despertarme esta mañana al lado de la persona que amo y poder abrazarla y besarla antes de irme a trabajar.

Gracias por recibir ese mensaje cómplice de "Bon dia".

Gracias por tener un trabajo cómodo, donde me siento bien, tranquila y relajada, pudiendo sentirme útil y para nada estresada.

Gracias por tener esa compañera de trabajo especial que siempre me recibe con una sonrisa y con la que puedo hablar de prácticamente cualquier cosa. Me escucha, me apoya y me "cubre" en todo mommento. Y viceversa, claro está!

Gracias por tener unos jefes que hacen que tu trabajo sea fácil y agradable que no ponen problemas para nada, sino todo lo contrario.

Gracias por sentir amor y poder pensar en mi persona favorita y poder dibujar una sonrisa en mi rostro, sabiéndome correspondida.

Gracias por sentirme sana, sin dolores y con energía para afrontar el día a día.

Gracias por mis padres, que me cuidan horrores y por una familia que me quiere y me acepta tal y como soy.

Gracias por esa amiga que siempre está al otro lado del teléfono para escucharme y apoyarme o, decirme lo que no me apetece escuchar a veces.

Gracias por el resto de amigas que ocupan un lugar especial en mi corazón.

Gracias por el recepcionista que siempre me saluda con una sonrisa de oreja a oreja.

Gracias porque tengo un piso maravillosamente acogedor y perfectamente situado.

Gracias porque puedo desarrollar mi pasión por la escritura a través de varios blogs.

Gracias porque mi cuenta corriente me permite gastar casi lo que me apetece.

Gracias porque hoy pasaré un tiempo maravilloso con mis primas y con mi amor y porque hoy dormiré nuevamente abrazada a ella... y seguro la besaré y acariciaré y rebosaré de placer al hacerlo.

Gracias por el hoy.

Gracias por seguir aprendiendo y seguir avanzando y por poder valorar cada detalle del día.

Gracias porque sé que mi bienestar depende principalmente de mí, y de mi actitud frente a la vida y sus incertezas.

Gracias porque no soy perfecta, ni pretendo serlo, pero estoy aprendiendo a aceptar y a amar cada parte de mí.

Gracias porque, aunque haya mucha gente de vacaciones y yo siga tabajando, me siento inmensamente feliz con mi "edulcorada" rutina de esta semana. Porque sí, yo estoy muy bien sola, pero prefiero compartir mis días y mis momentos con la persona a la que amo. No lo necesito, pero lo prefiero.

GRACIAS GRACIAS GRACIAS!

No hay comentarios:

Publicar un comentario